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LA CASCADA DE BABEL: Historia, Letras, Libros

Manuel Suárez revive en el salón de plenos ourensano

Manuel Suárez revive en el salón de plenos ourensano

Manuel Suárez Castro, Manoliño (Ourense, 1889-1937) fue cantero, dirigente de UGT, se carteó con Pablo Iglesias y fue también el último alcalde republicano de su ciudad. Quienes le conocieron le definen como un político dialogante, pacifista y dispuesto a ayudar a sus convecinos independientemente de la ideología que profesasen. Estalló la guerra civil y pasó siete meses escondido en su casa. Pero el brazo armado de la Nueva España le encontró, le acusó y al verano siguiente le mató.

73 años después, el bipartito municipal le rinde un merecido homenaje que, en palabras de su hija Lola Suárez Bretaña “llega tarde pero bueno... llega” (en la foto, sosteniendo otra de su padre). Razón no le falta, pues la moción para abrirle expediente de honores data de 2004. Empecé a escuchar hablar de Manuel Suárez hace diez años, cuando sólo los historiadores sabían de él. Y me conmovió enormemente su última carta, que ahora sale a la luz con motivo de su homenaje. Su asesinato ya no puede repararse, pero sí sacarse del olvido. 

Nada le retrata mejor que ese texto escrito poco antes de que le colocasen contra el paredón y que reproduzco íntegro:

 

“Queridísima Celedonia y queridos hijos:

A este padre y este esposo, que durante toda su vida no ha prodigado más que el bien a todo el mundo, dentro de unas horas lo van a matar en nombre de la ley de la fuerza, pues es la que hoy sigue en los pueblos que dominaron para el terror unos hombres que habían jurado respetar la Constitución de esta España digna de mejor suerte. Hoy la están destrozando y para mayor escarnio lo hacen invocando a un Dios que, según su doctrina, decía que los hombres éramos hermanos. Tengo la seguridad completa de que si volviera a la tierra sería otra vez el que expulsase del templo a estos mercaderes de su religión que en este momento intentan para mayor escarnio que me confiese, cosa que he rechazado con las manifestaciones que se merecen por la farsa que vienen representando, ultrajando su religión, por el asentimiento que presentan a la matanza que se viene realizando a pesar de que ellos manifiestan que para matar, sólo Dios.

Por lo tanto, si aún quisieran cometer el nuevo escarnio de decir que lo hice, conste que es una falsedad más, como todas las que vienen propagando en los periódicos mercenarios de que disponen.

Dile a mis hijos siempre y en todo momento que su padre perdió la vida de una manera violenta, no por ser ladrón ni asesino, ni un mal ciudadano, y que por el contrario, perdió la vida por ser una persona decente, amante de todos sus ciudadanos, sin fijarse nunca en el ideal que tenían ni en su condición social, muriendo convencido de que ésta es la razón suprema por la que me hacen desaparecer. Porque en la España que quieren crear no tienen cabida las personas de buenos sentimientos, amantes de la familia y que jamás, ni de hecho ni por el pensamiento, pretendió hacer desaparecer a ningún ser humano. Pues a pesar de esto y según la sentencia que me han leído hace un momento, eran tales invenciones, como si yo fuera un asesino, para justificar este hecho que van a realizar, como lo han hecho ya con tantos otros hermanos.

Y nada más, tengo la seguridad de que muy en breve los culpables pagarán también con su vida tan horrorosa tragedia, porque no tienen razones y porque además no pueden triunfar los que para conseguirlo se están ahogando en sangre.

Esta sangre derramada dará sus frutos y con esta comunicación plena, muero tranquilo, porque mi única preocupación sois vosotros y la situación en que de momento quedáis, situación que será reparada en el momento próximo en que sean vencidos los que me hacen desaparecer.

¡¡Adiós para siempre amantísima esposa y queridísimos hijos, con muchos besos y abrazos de tu esposo y padre!!

Cuartel de Ourense, 27 de julio de 1937”

 

1 comentario

guS -

Q fuerte... Encantoume. Marcho pra cama q mañá toca Moncho por un tubo, en sesión matutina e vespertina... Bicos